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Hulk y Marvel

lunes, junio 16

Fui a ver Hulk. Pero antes de hablar de la película, quiero hablar de como Marvel se está enfocando a sus películas. Llevar un cómic al cine siempre es complicado. Son décadas de desarrollo de un personaje que se deben acomodar a dos horas de película (con suerte). Además, normalmente las ideas del escritor sobre el personaje pueden diferir mucho de la línea editorial. Hay casos emblemáticos (como todos esos bati-bodrios colorinches y con pezones). La cosa es que Marvel, al crear su propia productora y mantener todo el proceso creativo bajo su control, ha logrado que sus dos últimas películas (IronMan y Hulk) sean una maravilla comercial y en respeto al personaje. Tienen momentos ñoños, donde los seguidores acérrimos se derriten, los aficionados gozamos y el público en general disfruta igual (aunque no lo entienda). O sea, para todo público.
Ahora, a Hulk. Las dos películas anteriores no fueron un éxito, una basada en la serie de TV y la otra un mal intento de llevar el Hulk del cómic a la pantalla grande. La primera, siguiendo la línea de la serie, era más una película para TV que otra cosa y la segunda, salvo una que otra secuencia de acción es algo totalmente olvidable.
Pero la tercera es la vencida. La decisión de saltarse todo el génesis de Hulk (bueno, incluyéndola en la presentación, pero sin dedicarle tiempo dentro de la película) fue arriesgada pero acertada, los momentos ñoños (¡Hulk smash!, el aplauso sónico, la caída desde el helicóptero copiada directo desde el cómic, las referencias al Capi América, la aparición del Doc. Samson, etc.) fueron hechos para el goce de todos, los entendieras o no y, adicionalmente, con una acción impecable, de película 100% comercial.
Y finalmente, las referencias a la posible película de los Vengadores. Que me caen mal, pero que si se logra hacer manteniendo los actores de las películas independientes, será algo digno de ver.
Película entretenida, no excelente, pero tampoco decepciona.

Nos leemos.

1 comentarios:

Anónimo dijo...

Una cosa que no entiendo es todo este rollo que tienen los hombres jóvenes con "ñoño". Independiente de que es una palabra horrible que me evoca a un tipo con lentes poto de botella, no sé qué significa ni cuál es el problema, pero es una palabra que sale tan a menudo cuando hablo con ustedes.